En Kmaleon cuando hablamos de DESARROLLO PERSONAL y PROFESIONAL, buscamos abarcar de manera integral la totalidad de la persona en sus seis dimensiones: Dimension mental, emocional, física, espiritual, social y natural. Es un viaje hacia la autoconciencia y la realización, donde nos sumergimos en la exploración de su ser interior para desentrañar sus potenciales ocultos y alcanzar una vida más plena y significativa.
Este proceso no solo se limita a la adquisición de conocimientos externos, sino que implica una profunda introspección y transformación interna que conduce a un mayor entendimiento de si mismo y del mundo que nos rodea. Una de las piedras angulares del desarrollo personal es el continuo autodescubrimiento, lo que implica mirar hacia adentro con curiosidad y valentía, explorando nuestros pensamientos, emociones, creencias y valores arraigados.
A través de este proceso, podemos identificar nuestras fortalezas y debilidades, reconocer patrones de comportamiento limitantes y descubrir nuestras verdaderas pasiones y propósitos en la vida.
El autodescubrimiento nos empodera al proporcionarnos claridad y dirección, permitiéndonos tomar decisiones más conscientes y alineadas con nuestros valores fundamentales.
Para alcanzar esos resultados utilizamos una variedad de metodologías y técnicas (cada persona es diferente) que nos llevan a alcanzar los resultados deseados, entre ellas estan:
El coaching ontológico es una metodología que se adentra en el núcleo mismo de la experiencia humana, explorando la esencia del ser y la manera en que las personas interactúan con su entorno. Se basa en la premisa de que el cambio genuino surge de una transformación profunda en la comprensión y la percepción que una persona tiene sobre sí misma, su contexto y sus relaciones. El coaching ontológico se basa en el hecho de que nuestras creencias, interpretaciones y formas de actuar moldean nuestra realidad.
Como coach ontológico, soy un facilitador de la evolución de autoindagación que busca desafiar las creencias limitantes y promover una mayor autenticidad y plenitud en la vida de sus clientes. Una de las principales áreas de trabajo es el desarrollo de la conciencia de sí mismo. Esto implica ayudar al cliente a explorar sus patrones de pensamiento, emociones y comportamientos, así como las creencias arraigadas que pueden estar actuando como obstáculos para su crecimiento y desarrollo.
Al tomar conciencia de estos aspectos, podemos empezar a cuestionar y reevaluar la visión del mundo y de sí mismo, abriendo la puerta a nuevas posibilidades y perspectivas, pero sobre todo, asumiendo la responsabilidad de su vida, reconociendo que somos los arquitectos principales de nuestro destino, dejando de lado el papel de víctima y adoptar una postura proactiva y empoderada frente a los desafíos y oportunidades que se presentan.
Enfoco el coaching tanto a profesionales en roles empresariales, laborales y educativos, como a cualquier persona que aspire a mejorar su desempeño en el ámbito laboral a corto plazo y abordar cuestiones que van más allá de lo superficial.
El coaching sistémico es una metodología que se fundamenta en una comprensión holística de la experiencia humana, reconociendo que las personas están interconectadas con su entorno y que sus acciones y comportamientos son influenciados por las dinámicas de los sistemas en los que participan. Este enfoque considera a la persona como parte de un sistema más amplio, que puede ser una familia, una organización, una comunidad o cualquier otro grupo social, y trabaja para identificar y abordar los patrones y dinámicas que influyen en su comportamiento y desempeño.
Las diferentes situaciones individuales no pueden ser comprendidos ni abordados adecuadamente sin considerar el contexto más amplio en el que se producen; por lo tanto, adopto una perspectiva global que reconoce las interconexiones entre diferentes elementos dentro de un sistema y cómo estos afectan el funcionamiento general del sistema y de sus miembros.
Una de las principales características del coaching sistémico es su enfoque en las relaciones y las interacciones entre las personas dentro de un sistema, exploro cómo éstas relaciones influyen en el comportamiento y el desempeño de las personas, así como en el funcionamiento general del sistema. Esto puede incluir la identificación de patrones de comunicación disfuncionales, conflictos no resueltos o dinámicas de poder que afectan negativamente el ambiente y el rendimiento dentro del sistema.
Para llevar a cabo este trabajo, utilizo una variedad de herramientas y técnicas diseñadas para explorar y comprender las complejas relaciones y dinámicas dentro del sistema.
Estas pueden incluir entrevistas con diferentes miembros del sistema, observación directa de las interacciones dentro del sistema, análisis de diagramas de flujo o mapas sistémicos y la aplicación de enfoques narrativos o constructivistas para comprender las percepciones y las experiencias de los participantes.
El coaching, aplicando la inteligencia emocional representa un enfoque profundo y transformador que reconoce la importancia fundamental de las emociones en la vida personal y profesional de una persona.
Este enfoque se basa en la premisa de que las habilidades emocionales son esenciales para alcanzar el éxito en todos los aspectos de la vida, ya que influyen en nuestras interacciones con los demás, en nuestra capacidad para manejar el estrés y los desafíos, y en nuestra capacidad para tomar decisiones informadas y efectivas.
El objetivo es desarrollar la capacidad del cliente para reconocer, comprender y gestionar sus propias emociones, así como las emociones de los demás. Esto se logra a través del fortalecimiento de las cuatro áreas clave de la inteligencia emocional: la autoconciencia, la autorregulación, la empatía y las habilidades sociales.
La autoconciencia: Te ayudo a reconocer y comprender sus propias emociones, así como los pensamientos y patrones de comportamiento asociados con ellas. Esto implica explorar las experiencias pasadas, los valores personales y las creencias arraigadas que pueden influir en las respuestas emocionales del cliente en diferentes situaciones.
La autorregulación: Esto implica aprender a manejar y controlar las emociones de manera efectiva (gestionarlas), en lugar de permitir que estas emociones dicten las acciones y respuestas de la persona. Ayudo a desarrollar estrategias prácticas para regular el estrés, la ansiedad y otras emociones negativas (prefiero llamarlas no apropiadas), y a cultivar una mayor estabilidad emocional y autocontrol.
La empatía: Busco que el cliente trabaje para tener una comprensión más profunda de las emociones y experiencias de los demás, lo que les permite establecer conexiones más significativas y auténticas con quienes les rodean. Esto implica practicar la escucha activa, ponerse en el lugar del otro y desarrollar una mayor sensibilidad hacia las necesidades y preocupaciones de los demás.
La inteligencia emocional: Es importante que el coachee (cliente) aprenda a comunicarse de manera clara, asertiva y afectivamente, a resolver conflictos de manera constructiva y a establecer relaciones saludables y satisfactorias. Desarrollando habilidades de comunicación interpersonal, trabajo en equipo y liderazgo que les permitan interactuar de manera efectiva con colegas, amigos, familiares y otros miembros de su comunidad.
